En su mensaje pascual de este Domingo 31 de marzo, el Papa Francisco expresó su anhelo de paz y el fin de las guerras en todo el mundo, especialmente en Tierra Santa y Ucrania.
Este 31 de marzo, Domingo de Pascua, el Papa Francisco presidió la Santa Misa en una Plaza de San Pedro abarrotada de fieles y peregrinos de todo el mundo.
La Iglesia Católica celebra la realización del sentido último de la Fe: Cristo ha vuelto a la vida y ha triunfado sobre la muerte y el pecado. Y, con ello, abre las puertas del cielo para que todo aquel que quiera, pueda participar de la vida divina.
En la homilía de la Vigilia Pascual que presidió este 30 de marzo, Sábado Santo, el Papa Francisco afirmó que con su resurrección, "el Dios de lo imposible" ha hecho que "la esperanza no tenga fin"; y que podamos derrotar todos los "escollos de muerte".
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